FELICIDAD A PLAZOS

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Por: Cinthya Mora Robles

Distribuir tus ingresos de acuerdo con tus prioridades y posibilidades te podrá permitir alcanzar las metas que te propongas y así poder alcanzar tu felicidad financiera. 

Todos estamos en busca de la felicidad, pero ¿existe la felicidad financiera? De hecho sí, y surge al alcanzar una meta deseada sin generar deuda o estados de ansiedad, por lo que es circunstancial y no un estado garantizado, al contrario de lo que pudiéramos imaginar, esto nos abre la posibilidad a tener una percepción de plenitud ante un proyecto duradero, es cuestión de administración, enfoque y disciplina. 

Trabajar las finanzas personales en tres planos y tres pasos conduce a un estado de satisfacción y felicidad durante periodos más prolongados. El primer paso es definir tus metas futuras (largo plazo), la serie de pasos que te llevarán a conseguir esas metas futuras (mediano plazo) y aquellas que definen tus necesidades actuales (corto plazo). 

El segundo paso es distribuir tus ingresos de acuerdo con tus prioridades y posibilidades, siempre en el siguiente orden: 

Págate a ti primero. Destina un 20% de tu ingreso al ahorro y protección de tus metas de mediano y largo plazo. 

Identifica tus gastos fijos. Considera que el 50% de tus ingresos deben cubrir tus necesidades básicas de corto plazo. 

Prioriza tus gastos variables. El 30% restante dirígelo a tu estilo de vida (viajes, diversión, comidas fuera), evitando fugas financieras. 

Por último, evalúa y ajusta tus metas y la distribución de tu ingreso, para ello te recomiendo diferenciar los gastos por impulso de lo que es imprescindible, plantéate la simple pregunta “¿en qué cambiaría mi vida si no tengo esto?”. Haz un ejercicio donde describas cuál es el destino de tus gastos (gastos fijos, entretenimiento, viajes, etc.), y es aquí en donde otra interrogante te puede ayudar a orientar el estado de felicidad en el que te encuentras: “¿qué es lo que más me da felicidad en la vida?” y compara las respuestas con la aplicación de tus recursos financieros, ¿coinciden?, ¿estás invirtiendo en lo que te hace feliz? Por ejemplo, si te hace feliz viajar ¿estás ahorrando o invirtiendo tu dinero para que lo puedas seguir haciendo en tu edad de retiro? 

Comienza a generar un equilibrio en tus finanzas y estado emocional, avalúa y proyecta estados de felicidad más duraderos, controla tus finanzas y no permitas que tus gastos te controlen a ti. 

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