Medita, por la ciencia o por la tradición

Fecha

Por Angélica Íñiguez

¿Qué es la meditación? ¿Cómo la explica la ciencia? Y si la ciencia no la explica ¿pierde validez? La meditación es una maestría con la que nacemos y vamos perdiendo al crecer, al olvidarnos de quienes somos. Y sin ser investigadora de meditación ni heredera de una tradición milenaria, pero sí practicante y curiosa de la meditación, me atrevo a afirmar que todos hemos meditado alguna vez.

Yo creo que los bebés meditan al ser amamantados (o al tomar su bibi), que los niños meditan cuando juegan, que los amantes del futbol meditan cuando disfrutan de una cascarita y no piensan en otra cosa, que todos meditamos de manera natural cuando nos bañamos, o lavamos los trastes, cuando recién despertamos y todavía no se nos agolpan los pensamientos en la cabeza.
Podríamos decir que meditar es entregarse al momento presente en cuerpo y alma, al cien por cien. Pero como se trata de un asunto tan personal y tan íntimo, cada practicante podrá tener su propia experiencia y, basada en ella, su propia definición ¡y será correcta! 

O, mejor dicho, en materia de meditación no hay correcto ni incorrecto, no hay práctica buena o práctica mala. De hecho podríamos pensar que la meditación busca trascender la dualidad –o que no lo busca, simplemente lo hace.
La meditación es una práctica que lleva activa y vigente miles y miles de años, por lo que se han desarrollado miles y miles de formas de hacerlo.

Estudios científicos han demostrado que…

Recientemente la ciencia actual (nuestra magia moderna) se ha interesado por la meditación, por entenderla, por saber cómo funciona y qué sucede en el cuerpo, especialmente en el cerebro, cuando la practicamos. 

En algunos casos, la ciencia ha definido a la meditación como la metodología de la ciencia de la observación. Pero una definición así nos dice poco, sería más interesante, por un lado, experimentar la meditación en vida propia y, por otro, hay cosas más interesantes que ha arrojado la ciencia que una definición.
Joe Dispenza, quiropráctico, neurólogo, investigador y autor de libros ha descubierto que no estamos condenados a nuestra genética, sino que el cerebro se puede reprogramar.
Dispenza tuvo un tremendo accidente que lo dejó sin caminar por un tiempo y lo llevó a una comprensión más alta de la vida conjuntando su mente científica y su entrenamiento como quiropráctico y meditador.

Estudió las partes que componen el cerebro, y las interacciones entre el comportamiento de un individuo y sus conexiones neuronales. Por ejemplo, a través de pruebas relacionadas con encefalogramas, tomografías y resonancias magnéticas hechas a meditadores, se pudo comprobar que una hora de concentración en un concepto o idea duplica la cantidad de conexiones neuronales. 

Otra cosa comprobada es que si logramos tener coherencia entre nuestra intención y nuestro comportamiento, entre lo que pensamos y lo que sentimos, y logramos que nuestra mente y nuestro cuerpo trabajen juntos, entraremos en coherencia y podremos tener nuevas experiencias de vida. 

A lo largo de años impartiendo talleres de meditación y haciendo experimentos científicos ha presenciado situaciones que podríamos considerar milagros que, sin embargo, tienen una comprobación científica, como gente que ha recuperado la posibilidad de caminar o que ha desarrollado la visión con los ojos cerrados. 

La meditadora Mar del cerro, creadora y host de Medita podcast, con una gran cantidad de seguidores, dice que la meditación es algo que no se puede definir, no hay verdades absolutas y nadie te puede decir si estás meditando o no. La meditación es una práctica personal, íntima, por lo tanto no hay forma buena y mala de meditar, sino maneras que hacen clic con cada uno de nosotros. Algunas de las corrientes de meditación más famosas son Mindfulness, meditación Trascendental, Vedanta, yoga, meditación budista, Focus in, Tai Chi, las prácticas de Deepak Chopra y Osho.

Para meditar no hay habilidades o entrenamientos previos requeridos, aunque para técnicas específicas sí hay herramientas y pasos a seguir. Por ejemplo, para la práctica de Hatha Yoga se hacen asanas (posturas) con la intención última de sanar tu cuerpo y adecuarlo para la meditación.

Pero no nos confundamos, no es necesario sentarse en flor de loto ni retirarse del mundo trivial para volverse meditador, hay meditaciones cantando, bailando, acostados y, como decía, lavando los trastes o haciendo cualquier actividad en presencia plena.

Mar del Cerro afirma que “la meditación no se enseña, porque la paz ya está en ti, tú ya eres tú, tú eres parte del todo. Puedes aprender algunas herramientas, pero la experiencia es solo tuya”. 

Y todos pueden meditar, no hay restricción de edad, género, raza o profesión. Y así como una busca a sus maestros de yoga (y a sus maestros de lo que sea) podemos buscar también un guía de meditación que nos caiga bien y  que respete nuestro proceso.

“Si tuviera que definir hoy qué es la meditación, diría que meditar es una práctica de amor propio en la que me declaro como prioridad en mi vida”, define Mar del Cerro. ¿Y para ti qué es la meditación? 

Recomendaciones:
Podcasts
Medita Podcast de Mar del Cerro
Vibrando Alto de Vero Fuentes
Libros
El placebo eres tú de Joe Dispenza
Deja de ser tú de Joe Dispenza
Series en video
Rewired en Gaia.com de Joe Dispenza


Angélica Íñiguez Pérez
IG @ainyoga
FB @angelica.iniguez.perez
E-mail: ange.iniguez@gmail.com
Es editora de Rezpira, un espacio que considera de crecimiento personal y donde puede expresar sus dudas y deseos de profundizar en temas espirituales, psicológicos, de nutrición, ecología, salud, y todo lo que le resulta apasionante. Es instructora de yoga desde hace 11 años, y en conjunto con su formación como bailarina de danza contemporánea y su acercamiento a técnicas somáticas, da clases con un estilo propio que busca el mayor bienestar posible en sí misma y en cada practicante. Ha sido periodista cultural en radio, prensa escrita y TV. Es licenciada en Artes Audiovisuales por la UdeG y maestra en Investigación de la Danza por el INBA, sobre este último campo de conocimiento tiene tres libros publicados. Es creadora de Corpusapiens, Diplomado Creativo en Investigación de la Danza.

Te puede
interesar

es_MX